Los Soldados Blancos son unos personajes de la novela A través del espejo y lo que Alicia encontró allí de Lewis Carroll. Ellos son leales sirvientes a los reyes blancos. Se tratan de todo el ejército blanco a excepción de los dos caballos blancos que juegan la partida, el Caballero Blanco y el Unicornio.
Descripción[]
A través del espejo y lo que Alicia encontró allí[]
Ilustración de John Tenniel.
Cuando Zanco Panco se cae del muro, al momento comienzan a acudir los Soldados Blancos corriendo desde todas partes del bosque para intentar devolverlo al muro, primero en grupos de dos y de tres, luego en grupos de diez y veinte, y finalmente en cohortes tan numerosas que parecían llenar el bosque entero.
Cuando aparecen, Alicia se esconde por miedo a que pudieran atropellarla, pues los soldados no eran tan firmes, ya que tropezaban constantemente con cualquier cosa de la manera más torpe, y cada vez que uno de ellos daba un traspiés y rodaba por el suelo, muchos otros más caían detrás sobre él, de forma que al poco rato todo el suelo estaba cubierto de soldados apiñados en pequeños montones.
Más tarde aparecen los caballos, los cuales, a pesar de arreglárselas mejor que los soldados, también tropezaban. Aparentemente, parecía haber una regla que cada vez que tropieza un caballo, su jinete debe caer al suelo en el acto.
Apariciones[]
Película de Tim Burton[]
En esta película, los Soldados Blancos son mucho más firmes que en la novela original. Van armados de los pies a la cabeza con una armadura metálica de color blanco, con cascos que muestran su clase: peones, torres, alfiles o caballos. Son fieles a la Reina Blanca.
Uno de los soldados, el Caballero Blanco, portaba la legendaria Espada Vorpalina, pero fue aniquilado por el Galimatazo en el Día Horribloso.